Volver a tener una segunda oportunidad

¿Qué pasa cuando un alumno/a sale del sistema educativo de forma temprana? ¿Qué hacemos con los jóvenes etiquetados como “problemáticos”? ¿Tienen oportunidades para volver a encauzar su vida?

Eso mismo se preguntaban la Fundación Tomillo. Han creado un espacio y herramientas para no dejar de lado el potencial y el talento de los jóvenes. Solo por el hecho de tener malas experiencias en el sistema educativo parece que no puedan acceder a un lugar donde puedan desarrollar como personas y como futuros profesionales, por ello esta identidad es importante.

¿Qué es la Fundación Tomillo?

“La Fundación Tomillo es una entidad privada, sin ánimo de lucro, no confesional e independiente que nace en 1984 con el propósito de contribuir a la mejora social y al desarrollo de la persona.

Nuestra actividad la realiza un equipo de personas compuesto, en su mayoría, por maestros, pedagogos y psicólogos, que desarrollan los distintos programas dirigidos a la infancia, adolescencia y familia, así como a la formación y la orientación sociolaboral.”

¿Su objetivo?

“Contribuir a la mejora de nuestra sociedad ayudando a las personas en situación de dificultad a mejorar sus vidas y su comunidad.”

¿Cómo lo consiguen?

Teniendo como valores:

1.  Humanismo
2.  Optimismo
3.  Compromiso y Determinación
4.  Rigor
5.  Integración

Las escuelas de segunda oportunidad que ofrecen la Fundación Tomillo son un reflejo de que si existen es por una falta de calidad y equidad en la educación de los centros públicos. Y me hago la pregunta de, si esta ausencia fomenta las desigualdades en la escuela ¿por qué  no invertimos en mejorar nuestro sistema educativo?

Ellos lo tienen muy claro: “el riesgo a la exclusión se supera con la educación”